por Michael Forrester
22 Noviembre 2012
del
Sitio Web PreventDisease
traducción de
Adela Kaufmann
Versión original en ingles
Versión original en ingles
Michael Forrester es un consejero espiritual y es un
orador motivacional para la práctica de las empresas en
Japón, Canadá y Estados Unidos.
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Un equipo de
investigación biológica en la
Universidad de Bielefeld ha hecho un
descubrimiento sin precedentes que demuestra que las plantas
pueden extraer una fuente alternativa de energía a partir de otras
plantas.
Este hallazgo
también podría tener un gran impacto en el futuro de la bioenergía
eventualmente proveer la evidencia para demostrar que la gente saca
la energía de otros en la misma forma.
Los miembros del equipo de investigaciones biológicas del Profesor Dr. Olaf Kruse ha confirmado por primera vez que una planta, el alga verde Chlamydomonas reinhardtii, no sólo se dedica a la fotosíntesis, sino que también tiene una fuente alternativa de energía: puede extraerla de otras plantas.
Los resultados
de la investigación fueron publicados esta semana e la revista
online Nature Communications publicada por la renombrada revista
Nature.
Las flores necesitan agua y luz para crecer y la gente no es diferente. Nuestros cuerpos físicos son como esponjas, absorbiendo el ambiente.
Las flores necesitan agua y luz para crecer y la gente no es diferente. Nuestros cuerpos físicos son como esponjas, absorbiendo el ambiente.
"Esto es exactamente por qué hay ciertas personas que se sienten incómodas en grupos específicos en los que hay una mezcla de energía y emociones", dijo la psicólogo y sanadora energética, la Dra. Olivia Bader-Lee.
Las plantas
participan en la fotosíntesis de dióxido de carbono, agua y luz.
En una serie de
experimentos, el profesor Dr. Olaf Kruse y su equipo
cultivaron la microscópicamente pequeña especie de alga
verde Chlamydomonas reinhardtii especies y observó que cuando se
enfrentan a una escasez de energía, estas plantas unicelulares
pueden obtener energía a partir de celulosa vegetal en lugar vecino,
en su lugar.
El alga secreta
enzimas (llamadas enzimas de celulosa) que "digiere" la celulosa,
dividiéndola en componentes más pequeños de azúcares.
Estos son
entonces transportadas a las células y se transforman en una fuente
de energía: el alga puede continuar creciendo.
"Esta es la primera vez que tal comportamiento ha sido confirmado en un organismo vegetal", dice el profesor Kruse. Que las algas pueden digerir la celulosa contradice cada libro de texto anterior. En cierta medida, lo que estamos viendo son plantas comiendo plantas.
Actualmente, los
científicos están estudiando si este mecanismo también puede ser
encontrado en otros tipos de alga.
Los resultados
preliminares indican que este es el caso.
"Cuando los estudios energéticos se vuelvan más avanzados en los próximos años, al final se verá esto traducido a los seres humanos también", dijo Bader-Lee.
"El organismo humano es muy parecido al de una planta, extrae la energía necesaria para alimentar los estados emocionales y esta esencia puede energizar células y causar incrementos en el cortisol y catabolizar células en función de la detonación emocional."
Olivia
Bader-Lee sugiere
que el
campo de la bioenergía está
en constante evolución y que los estudios sobre el mundo vegetal y
animal pronto se traducirán y demostrar lo que los metafísicos de
energía han sabido todo el tiempo - que los seres humanos pueden
sanarse unos a toros simplemente a través de la transferencia de
energía al igual que lo hacen las plantas.
"Los humanos pueden absorber y sanar a través de otros seres humanos, animales, y cualquier parte de la naturaleza. Esa es la razón por la cual, estar cerca de la naturaleza a menudo es estimulante y energizante para tanta gente", concluyó.
Aquí están cinco
herramientas energéticas a utilizar para limpiar su espacio y evitar
que se drene la energía mientras se está liberando:
Manténgase centrado y conectado a tierraSi usted está centrado dentro de su ser espiritual (en lugar de su analizador o ego), sentirá de inmediato cuando algo se ha movido en el espacio.Si está completamente conectado a tierra, usted puede fácilmente liberar energía de otras personas y emociones hacia abajo, hacia sul cable de puesta a tierra con su intención.
Estar en un estado de no-resistencia - Aquello a lo que nos resistimos se pegaSi se siente incómodo en torno a una determinada persona o en un grupo, no entre en resistencia como una manera de protegerse, ya que esto sólo mantendrá la energía extraña atorada en su espacio.Muévase a un estado de no-resistencia al imaginar que su cuerpo es claro y transparente como el cristal o el agua. De esta manera, si alguien arroja algo de invalidación a usted, esto pasará a través suyo.
Sea dueño de su espacio personal del auraCada uno de nosotros tiene un aura energética que rodea nuestro cuerpo. Si no somos dueños de este espacio personal somos vulnerables a la energía extraña que entra.Tome conciencia de los límites de su aura (como la distancia alrededor de un brazo de su cuerpo todo el camino alrededor, arriba y abajo) como una manera de ser dueño de su espacio personal.
Dese una limpieza energéticaEl color dorado tiene una alta vibración que es útil para despejar la energía exterior.Imagine una ducha de oro en la parte superior de su aura (unos pies por encima de su cabeza) y enciéndalo, permitiendo que la energía dorada clara fluya a través de su aura y cuerpo y libere espacio abajo de su anclaje. Usted se sentirá limpio y fresco.
Llame a su energíaCuando tenemos nuestra energía en nuestro propio espacio hay menos espacio para que entre la energía del otro.Pero a medida que nos centramos en otras personas y proyectos a veces regamos nuestra energía alrededor. Crear una imagen de un sol dorado claro a varios metros por encima de su cabeza y que sea un imán, atrayendo toda su energía nuevamente dentro de él (y purificándola en la energía de oro).Luego bájela a través de la parte superior de su aura y en su espacio corporal, liberando su energía nuevamente dentro de su espacio personal.
Fuentes
Cellulose degradation and assimilation by the unicellular phototrophic eukaryote Chlamydomonas reinhardtii - by Olga Blifernez-Klassen, Viktor Klassen, Anja Doebbe, Klaudia Kersting, Philipp Grimm, Lutz Wobbe and Olaf Kruse
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